martes, 3 de junio de 2008

Vivir con, vivir sin

¿Quién me quita la vida? ¿Quién me la da? ¿De dónde vendré? Callar y hartarse de uno mismo. Lejos, lejos, el gran sueño, mas cada vez más imposible. Pareciera que todo me jalara para permanecer en un solo sitio. ¿Empezar a vivir? ¿Saber vivir? Vivir con o vivir sin. Y los recuerdos me atormentan de manera deliciosa, los creados y los por crearse. Reconsiderar debe ser algo únicamente hecho para los súperhombres, yo soy un pobre mortal, falible, sucio, incómodo para todos. ¡Éso debe ser! Que siempre he sido incómoda para todos los que me rodean; soy como un mosquito silencioso que, cuando hace su aparición, importuna.
Quito la tranquilidad al por mayor. ¿Quién quiere eso en su vida?
Mejor aléjenme.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si y sólo sí eres mortal, serás falible.
No renuncies nunca a tu mortalidad. Los dioses que no se equivocan, nada sienten, nada cambian.
No pueden ser conmovidos.