miércoles, 19 de diciembre de 2012

Un árbol no cristiano.



Tú y yo poniendo un árbol. ¿El fino arte de contar una historia en un árbol? Mi insistencia del árbol laico, tú sin poner resistencia. Te beso, te miro, quiero tus dedos, tu paciencia. Pruebas las series fundidas de los años y yo sólo quiero jugar a tu lado, quiero que colguemos las esferas que compramos cuando viajé a tu encuentro. Soy feliz, me lleno de dicha, soy tuya y tú, mío. Somos nosotros los que adornamos un pedazo de plástico con esferas de colores y foquitos. Un árbol de la eternidad, del ciclo que se cerró hace poco, del ciclo que hemos abierto y que prometimos vivir, vivirnos.


No hay comentarios: